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Emboquillar es rellenar partes que han quedado huecas para evitar que se formen hongos o cosas peores. Para llevar a cabo esta función se utilizan boquillas que pueden ser con arena o sin arena.
Elegir una u otra dependerá del tipo de construcción a la que nos enfrentemos y del resultado final que necesitemos. Como adelantábamos antes, existen dos tipos de boquillas: con o sin arena.
La prueba de fuego para decantarte por una o por otra es la medida del espacio que se tiene que rellenar. La boquilla en sí es ese espacio a rellenar y por el que es necesario realiza resta acción.
Es una pena que después de realizar una construcción al detalle, con un gran esfuerzo por parte de los albañiles y del propio dueño de la construcción se pierda gran parte por no emboquillar de manera correcta.
Los beneficios de utilizar una boquilla con arena es que se combatirán los posibles hongos y bacterias que puedan salir, la construcción se verá más limpia, se evitarán desperfectos estéticos y se generará una sensación de armonía en la construcción en sí misma.
Boquilla con arena: te contamos qué es en profundidad
Tal como informábamos en el apartado anterior, las boquillas son esos espacios que existen en las construcciones. No solo quedan feos, sino que pueden dar lugar a bacterias y a que el lugar no quede limpio.
Existen varios tipos de boquillas, entre ellas las boquillas con y sin arena. Dependiendo de la construcción se elegirá una u otra.
Concretamente la boquilla con arena se trata de un emboquillador que tiene arenas calcáreas seleccionadas, cementero portland, polímeros, pigmentos que no pierden su color y una serie de aditivos químicos que hacen que cumpla su función correctamente.
Esto no es todo. Además, este compuesto permite que se repela la humedad y posee una resistencia altísima frente a la comprensión y la abrasión. Vamos, que es a prueba de balas.
Sus colores producen una gran estabilidad dentro de la construcción. Esto genera un embellecimiento del lugar y sus instalaciones, además de una durabilidad exquisita.
¿Qué diferencia hay entre una boquilla con arena y sin arena?
La pregunta del millón. Cuando se sabe que existen dos tipos de boquilla enseguida viene la gran pregunta. ¿Cuál es de la diferencia? Y después: ¿cuál es mejor?
Pues como te decíamos anteriormente no es que haya una mejor o peor, simplemente te tienes que decantar por una o por otra dependiendo de cómo sería la boquilla que tengas que tapar.
Si es entre 1 y 3 mm como máximo te conviene una sin arena. Por lo tanto, si estamos hablando de una boquilla entre 3 y 15 mm tienes que irte a una con arena. Son distintas porque no es el mismo esfuerzo ni procedimiento cuando tienen una medida u otra.
Existen riesgos distintos. Cuando la separación es más grande, la pasta debe ser mayor para que pueda adherirse correctamente. Así se volverá más resistente y podrá hacer frente a las grietas que se formen.
Para que esto se genera se necesita sí o sí arena.
¿Cuánto rinde la boquilla con arena?
Depende de la cantidad que compres. Si comparas un saco de 10kg, por ejemplo, la rendición será de entre 8 y 16 metros cuadrados. Dependerá también de la maña que te des para hacerlo tú o la persona que contrates para hacerlo.
Te aconsejamos que la mezcla que compres tenga cemento portland, el mejor para estos casos. La persona que vaya a llevar a cabo el trabajo debe lavarse las manos antes de comenzar el trabajo.
Ahora que conoces las características de la boquilla con arena, te animamos a probar nuestra boquilla con arena Boquillex Plus para unos resultados de la más alta calidad.